Antes del partido que los enfrentaba como visitantes al Urgavona CF, de Arjona, salieron al campo con una pancarta y leyeron un manifiesto a favor del respeto en el deporte. El Ayuntamiento arjonero hecho un reconocimiento a esta acción afirmando que «un campo de fútbol no es un cubo de basura en el que dejar nuestras frustraciones, provocaciones, insultos y hasta agresiones. Un campo de fútbol es un lugar en el que disfrutar del deporte, forjar nuevas amistades y aprender a respetar a los demás y a uno mismo. A veces, quienes nos educan son nuestros niños, niñas y jóvenes. Sólo hay que escucharlos».

Y es que, entre las proclamas de estos jóvenes futbolistas, estaban las de que «no importa nuestra raza, religión o género, a todos nos encanta. Para poder realmente disfrutarlo, necesitamos que haya respeto, cuando alguien no nos respeta, lo pasamos mal».

En su manifiesto pedían respeto para los entrenadores, «pues siempre van a querer lo mejor para nosotros»; respeto para las aficiones, «pues cada una siente sus colores de una misma forma aunque hoy sean equipos rivales»; también hacían extensiva la petición para el equipo contrario, «pues tienen la misma ilusión por jugar que nosotros»; también para sus equipos y los propios futbolistas, «pues nadie quiere fallar un pase o un penalti a posta»; y por último pedían también respeto para los árbitros, «pues del mismo modo que nosotros, no os equivocáis a posta. A diferencia de nosotros que tenemos nuestra afición, entrenador y compañeros para animarnos, ellos se encuentran solos, por eso os pedimos que os pongáis en su lugar y que siempre los tratéis con respeto. ¿Entendéis ahora por qué con respeto ganamos todos? Porque con él, ahora vamos a poder disfrutar de nuestra pasión que es el fútbol».