Enrique Garcés || 18 de mayo de 2021

El joven bailaor castillero Miguel Conde Lara llevará todo el arte del flamenco a las tablas del Teatro Calderón de la Barca de la ciudad granadina de Motril. Será el próximo 3 de julio en el marco del espectáculo «Óbices» que presenta la también debutante Sara Sánchez, y es que para ambos esta será su primer trabajo como profesionales del flamenco.

Miguel Conde Lara es natural de Castillo de Locubín, en la actualidad cuenta 19 años de edad, y como él mismo reconoce, la pasión por el flamenco le surgió siendo muy niño gracias a sus padres, que participaban en un coro en nuestra localidad «y en mi casa siempre se ha escuchado flamenco», dice orgulloso.

Miguel entró a los 8 años en el Conservatorio de Granada donde cursó durante cuatro años las Enseñanzas Básicas, en las que conoció el baile clásico, el español, el contemporáneo y el flamenco, por el que finalmente se decantó «por su estética y el arte que transmite». Por ello decidió especializarse como bailaor de flamenco y con 12 años de edad hizo las pruebas de acceso para obtener el Grado Profesional de Baile Flamenco, que finalizó el año pasado después de seis años de estudio y de trabajo. El año pasado comenzó sus estudios de Pedagogía de la Danza, en la especialidad de Flamenco, en el Conservatorio Profesional de Málaga «Ángel Pericet», donde deberá finalizar cuatro años de especialización para llegar a ser profesor de Flamenco en los Conservatorios, y que hoy por hoy es su gran sueño.

El espectáculo «Óbice» que se estrenará en Motril el 3 de julio será su primera aportación como profesional al mundo del flamenco… aunque se puede decir que Miguel Conde Lara «ya tiene muchas tablas» porque ha participado como aficionado en numerosos tablaos, e incluso tomó parte de algún espectáculo organizado en Castillo de Locubín hace unos años.

Miguel Conde Lara tiene las ideas claras y después de más de diez años de estudio se quiere dedicar profesionalmente al Flamenco «aunque con esto de la pandemia -reconoce- se han parado muchos proyectos». «De todas maneras sentí una gran ilusión cuando Sara Sánchez contó conmigo para participar en este espectáculo con otros compañeros del Conservatorio Profesional de Danza de Granada», y aunque es consciente que la estabilidad profesional se la dará su titulación como profesor de Conservatorio, también le gustaría estar en una compañía y poder presentar espectáculos por todo el mundo.