Cuando el talento se funde en arte

El sombrerero linarense Curro Coronel anuncia nueva colección mientras sus creaciones triunfan en todo el mundo

Muchos lo conocerán y otras tantos no. Quizá porque se marchó de Linares muy joven. Nació y creció en Arrayanes. Es un tipo duro, como los mineros que habitan en su barrio. Esos mismos que extrajeron de las entrañas de la tierra el plomo con el que él ha forjado una carrera que le ha llevado por todo el mundo. Se llama Curro Coronel y es uno de los hatter -sombrerero- más prestigiosos que existen en la actualidad.

Sus manos han pulido auténticas obras de arte que han desfilado por la Semana de la Moda de Nueva York, han aparecido en más de una escena de Óscar Jaenada y se han colado en algún que otro directo de Leiva. Este jueves ha anunciado en su página oficial de Facebook que «se viene nueva colección». Ha dejado ese escueto mensaje, acompañado de la fotografía de una de sus creaciones y la dirección de su web en la que recibe a los visitantes con dos frases marcadas a fuego: «No vivas esperando fracasos, sino celebrando victorias» y «Paso corto y mala leche». Leyendas de su propia personalidad.

Curro Coronel, que iba para estrella del baloncesto, sabe mejor que nadie lo que cuesta llegar a la cima. Ha tenido que comer mucho barro para, después, poder saborear las mieles del éxito y digerir los halagos que le llueven cada vez que publica en sus redes sociales algunos de sus sombreros.

El hatter linarense no ha desvelado nada sobre su próxima colección, pero a buen seguro que llevarán sus señas de identidad, enraizadas en su tierra, a la que echa de menos y de la que se siente orgulloso, como demuestra en las entrevistas que concede. Junto al fieltro y a la piel de alta calidad, siempre utiliza en sus colecciones materiales como el estaño, la plata y el plomo, materiales que, en su día, dieron de comer a muchas familias de Linares.

Los sombreros que elabora, soplete en mano, de forma totalmente artesanal, son como él: potentes, trasgresores, diferentes, atrevidos, impactantes y muy auténticos.Todos con un estilo propio.

Curro Coronel ha vivido en Granada, Londres, Ibiza, Tokio y ahora Barcelona desde donde se desplaza a cualquier rincón del planeta, siempre acompañado de un palillo, como los mineros. Amigo personal de otro grandes artistas internacionales de Linares, Belin, y del director creativo de Locco Committee, el segoviano Raúl Díez, con el que compartió penuarias y alegrías, Curro Coronel no para de explotar su creatividad en la moda, un sector que le permite expresar su filosofía de vida, el arraigo a su tierra y su gusto por lo auténtico.

Fotos: Facebook/Curro Coronel